Nueva información revelada en el tribunal arroja luz sobre el tiroteo en una gasolinera en Detroit
Shawn Ley, reportero
Brandon Carr, productor de contenidos digitales
DETROIT– Un nuevo video mostrado en el tribunal reveló cómo una situación en una gasolinera de ExxonMobil desembocó en un enfrentamiento mortal a través de una puerta cerrada entre el empleado y un cliente en Detroit.
El incidente ocurrió el lunes (5 de junio) a las 3 am cuando el empleado mató a tiros a Anthony McNary, de 25 años, después de un intercambio sobre un trozo de cecina.
La gasolinera volvió a estar abierta, pero el vídeo mostrado en el tribunal reveló cómo el empleado que estaba encerrado dentro de la tienda disparó y mató al hombre de 25 años en lugar de marcar el 911.
El empleado le pidió a McNary que saliera de la gasolinera porque pensó que el joven de 25 años estaba robando.
McNary, con una máscara en la cara y una capucha sobre la cabeza, merodeaba por el frente de la tienda, lo que provocó que el empleado cerrara las puertas.
No está claro por qué intentaba entrar a la tienda después del incidente, pero estaba claro que McNary estaba desarmado mientras tiraba de la puerta cerrada.
El empleado, Moad Mohamed Al-Gaham, de 40 años, le dijo a McNary que se fuera nuevamente, pero el hombre de 40 años sacó un arma y disparó a través del vidrio, disparándole en la cabeza al hombre de 25 años.
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En el tribunal, el abogado de Al-Gaham dijo que sólo estaba tratando de asustar a McNary y que el arma se disparó accidentalmente, pero que no se trataba de un asesinato premeditado.
“Sí, juez, no debería haberle apuntado con un arma para asustarlo, pero esto es lo que sucede cuando las armas no se usan de manera adecuada”, dijo el abogado.
El juez Kenneth King dijo que Al-Gaham nunca llamó a la policía para tratar con McNary fuera de la tienda porque no era una amenaza.
Al-Gaham estaba a salvo dentro de la tienda cerrada y tenía muchas opciones además de disparar a la cabeza de un hombre.
"El acusado estaba detrás de una puerta cerrada con un teléfono, una pistola y también podría haberse escondido detrás de un cristal a prueba de balas", dijo King. "Tenía muchas opciones que podría haber tomado, pero eligió un curso de acción diferente".
La familia de Mcnary ha presentado una demanda de 100 millones de dólares contra ExxonMobil.
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